Los primeros años de vida de un niño son
una aventura interesante. Desde consumir sus
primeros alimentos sólidos, la dentición, comenzar a gatear, hasta hablar. Tu hijo lleva una vida
diaria ocupada absorbiendo rápidamente nuevos conocimientos. Por consiguiente, tu hijo debe tener una buena
salud para crecer y aprender bien. Y una buena salud comienza con un buen intestino.
Un buen intestino mantiene a tu hijo protegido de
padecimientos y enfermedades, especialmente de dos males comunes durante la infancia: la diarrea y el
estreñimiento. Cuando el sistema inmune es fuerte y funciona adecuadamente, produce anticuerpos que proveen
una defensa natural contra organismos patógenos. Friso®Gold ayuda a
incrementar el número de bacterias amigables para que el sistema de defensa de tu hijo reciba el impulso
necesario.
Mientras te aseguras de cuidar una buena
higiene, no te preocupes de más si tu hijo se expone a algunos gérmenes. Están ayudando a fortalecer su
inmunidad, para que pueda ser lo suficientemente fuerte para explorar el mundo mientras se mantiene seguro,
feliz y sano
Tu hijo y la resistencia natural de su cuerpo
Juan Huitrado